Inscribir una vivienda en el Registro de la Propiedad no es obligatorio. La Ley no nos exige hacerlo y no es impedimento para la adquisición, herencia o constitución de inmuebles o terrenos.
Sin embargo, este trámite es necesario para pedir una hipoteca o para vender una casa, siendo el único título legal que demuestra y avala que somos los dueños de una vivienda frente a terceros.
Aunque actualmente en España se puede vender una casa sin estar registrada, la operación puede complicarse y puede acabar frustrándose porque los compradores desconfíen sobre los motivos por los que el inmueble no está escriturado.
La explicación es lógica: a veces, una vivienda no se inscribe en el Registro de la Propiedad porque la edificación es irregular, porque existen problemas relacionados con la titularidad de la vivienda o del terreno donde está construida (en caso de herencias, divorcios, litigios con empresas o particulares, etc.), porque la construcción se ha ejecutado sin las licencias correspondientes o porque existen cargas fiscales sobre la propiedad.
FUENTE: deplace.es